La teoría de Piaget hace especial hincapié en la infancia, a la que considera una etapa de vital importancia para el desarrollo cognitivo. Es durante este período cuando se establecen las bases del pensamiento, la percepción y el aprendizaje.
Durante la infancia, el cerebro tiene una gran plasticidad y capacidad de aprendizaje. Esto es lo que nos permite adquirir habilidades como el lenguaje, la memoria y la resolución de problemas.